A veces, cuando llega el verano y marchamos de vacaciones, queremos romper tanto con la rutina que también abandonamos las costumbres beneficiosas. Por ello, en este post queremos animarte a que en tu próxima escapada te dejes acompañar por tu Japa Mala para meditar o, incluso, energizarla de nuevo. Os lo contamos a continuación.
Un verano junto a tu Japa Mala para meditar y sentir mayor bienestar
El verano, para muchos, significa vacaciones. Puede ser un periodo más corto o más largo, en busca de playa y de montaña o de visitas más culturales. O, como te comentamos semanas atrás, un retiro espiritual para meditar o sumergirse en el yoga. En todos los casos, tratamos de buscar relajación y de elevar nuestras energías. El objetivo es dejar atrás los agobios de la rutina y volver como personas renovadas.
Si te has acostumbrado a practicar yoga o la meditación durante todo el año, ¿no crees que deberías seguir haciéndolo aunque estés de viaje? Es una forma de potenciar los efectos de estos hábitos, ya que la mente está más relajada en vacaciones y más abierta a absorber este tipo de prácticas positivas.
De esta manera, os animamos a llevarte tu Japa Mala para meditar en tu destino. Por ejemplo, recuerda los beneficios del agua del mar: si vas a una zona costera, intenta realizar alguna rutina de meditación en la playa en las horas tranquilas. De hecho, tanto el amanecer como el anochecer son ideales por la energía que transmiten estos momentos casi mágicos del día.
Sin embargo, ¡no solo te dejes acompañar por tu Japa Mala en la playa! La montaña, los pueblecitos de interior o las ciudades históricas, con siglos a sus espaldas, también son espacios en los que meditar y reforzar los efectos relajantes de unas buenas vacaciones. Además, obtendrás una nueva perspectiva sobre los sitios que visitas si te lanzas a la meditación en lugares que te transmitan una calma o una energía especial.
Llévate la Japa Mala también para volver a energizarla
Por todo lo que has podido leer anteriormente, además de utilizar tu Japa Mala en vacaciones para meditar, también es un momento excelente para volver a energizarla. Esta joya espiritual será capaz de tomar las buenas sensaciones que transmitimos al estar relajados, pero también las que emanan espacios naturales o llenos de cultura.
Como te explicamos en este post, la Japa Mala se carga gracias a la energía de quien la utiliza, así como de la frecuencia con que se usa: ¡no la dejes abandonada en casa y aprovecha este tiempo especial! Por otro lado, el poder del océano y del agua del mar es enorme: si sumerges tu Japa Mala, tomará sus beneficios.
En verano, además, hay noches tan especiales como San Juan y fenómenos como las Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Al tener más tiempo libre, además, podemos aprovechar estos momentos o cambios de ciclo lunar para dejar la Japa Mala tomar el poder de los astros durante periodos de unas dos horas.
Si llevas contigo tu Japa Mala para meditar a un lugar especial y realizas los pasos necesarios para energizarla, como te explicamos aquí, el proceso resultará mucho más satisfactorio. Otro factor a favor de elegir este momento del año es que tenemos la mente más clara a la hora de darle una intención a esta joya sagrada, por lo que su ayuda de vuelta a la rutina estará mejor enfocada.
Como has podido comprobar, llevar contigo tu Japa Mala para meditar en tus vacaciones está lleno de beneficios. No solo te ayudará a lograr un mayor bienestar este verano, sino que ella misma obtendrá energías positivas que la cargarán para el regreso. Si tienes cualquier duda sobre este post o explicar tu propia experiencia, cuéntanos: nos encantará leerte.
Respira, Enfoca, Medita, Siente.
Hasta la próxima.
Aum!