Los cambios de estación son las mejores épocas para realizar limpiezas profundas del organismo. De hecho, los equinoccios son perfectos para reflexionar sobre nuestros hábitos y dar paso a una depuración de primavera o de otoño. ¿Quieres saber más sobre ello y cómo llevarla a cabo? Te lo cuento en este post.
¿Por qué las dietas depurativas son ideales en primavera?
Marzo y septiembre marcan el fin de las condiciones ambientales más extremas del año. En el caso del invierno, nuestro organismo ha acumulado humedad y un exceso de mucosas que tienen que eliminarse para un correcto funcionamiento de órganos y tejidos.
A un nivel general, el cuerpo va acumulando una serie de toxinas que tienen un origen tanto interno como externo, y esto tiene una mayor incidencia a lo largo del invierno. ¿A qué me refiero?
- La polución, que ha sido especialmente intensa estos últimos meses por la falta de lluvias.
- Medicamentos, que generalmente consumimos más en invierno debido a los resfriados y a la gripe.
- Alimentos de baja calidad, que acostumbramos a tomar más en invierno por el estrés y la menor actividad en días fríos.
- Pesticidas, asociados a esa alimentación de baja calidad; debemos priorizar productos con un origen fiable.
El objetivo de llevar a cabo una depuración en primavera es aumentar la capacidad del organismo de metabolizar las toxinas y ayudarle a eliminar todas aquellas que se han ido acumulando en los tejidos del cuerpo. Al conseguirlo, sentimos un mayor bienestar y nos encontraremos mejor, lo que unido a la propia primavera nos generará un mayor equilibrio tanto mental como físico.
¿Cómo llevar a cabo la depuración en primavera?
La clave de toda dieta depurativa es activar el hígado y ayudarle a realizar su función en nuestro cuerpo. Una de las maneras más efectivas de lograrlo es a través de las infusiones: las plantas bien cargadas de clorofila y el agua son nuestras grandes aliadas.
Si decides dar el paso y llevar a cabo una dieta depurativa o simplemente cambiar algunos hábitos para limpiar tu organismo, lo primero es apartar el café y el azúcar de tus bebidas habituales: opta por el agua y por infusiones, tanto un simple té verde con menta como aquellas con un sabor amargo característico de los componentes antioxidantes; es el caso de la propio clorofila.
Entre las opciones más efectivas para la depuración están la cúrcuma, la espirulina, el cardamomo, el cilantro y el regaliz. Todos ellos pueden añadirse en la dieta al cocinar o en las propias infusiones. También se puede tener en cuenta el aloe vera, que puede tomarse extrayendo su pulpa o gel y combinándolo con el zumo del limón.
Descubre un plato perfecto para la depuración de primavera
Además de las hierbas y otros ingredientes con gran poder depurativo, hay elaboraciones ideales para limpiar el organismo de cara a la primavera. Es el caso de las recetas de dal, el gran exponente de la cocina ayurvédica que hace hincapié en eliminar la humedad del organismo, las toxinas y desinflamar el sistema digestivo.
Un plato ideal para este tránsito entre el invierno y la primavera es el dal de soja verde o judías mungo. Por un lado, esta legumbre se cocina sin piel, cociéndose con un poco de mantequilla clarificada (puede utilizarse aceite de oliva) y cúrcuma durante una hora.
Por otra parte, se tuestan semillas de comino y cilantro para hacer un majado, que se agrega a la cocción. La receta puede incluir espinacas baby, kale y pimientos o chiles, que se añaden tras las especias. El último paso es añadir jengibre, dejar reposar dos minutos todo el guiso y servir en un cuenco, al que añadir un par de cucharadas de arroz basmati ya preparado.
¿Te animas a realizar una depuración de primavera? Si es así, puedes plantearme cualquier duda que te haya surgido a lo largo del post y contarme cómo te sientes tras limpiar tu organismo de cara a la nueva estación. Estaré encantada de leerte y ayudarte.
Respira, Enfoca, Medita, Siente.
Hasta la próxima.
Aum!